Palabra de Dios | Las declaraciones de Dios al universo entero: La cuarta declaración
Todo Mi pueblo que sirve delante de Mí debería pensar en el pasado: ¿Estaba vuestro amor por Mí manchado de impureza? ¿Era vuestra lealtad hacia Mí pura y sincera? ¿Era vuestro conocimiento de Mí verdadero? ¿Cuánto espacio ocupaba Yo en vuestros corazones? ¿Lo llenaba totalmente? ¿Cuántas de Mis palabras cumplieron en vosotros? ¡No me toméis por tonto! ¡Estas cosas están muy claras para Mí! Hoy, cuando la voz de Mi salvación resuena, ¿se ha producido algún incremento en vuestro amor por Mí? ¿Se ha vuelto pura parte de vuestra lealtad? ¿Se ha profundizado vuestro conocimiento de Mí? ¿La alabanza del pasado sentó una base sólida para vuestro conocimiento actual? ¿Cuánto de vuestro interior está ocupado por Mi Espíritu? ¿Cuánto lugar ocupa Mi imagen dentro de vosotros? ¿Os han herido en vuestro talón de Aquiles Mis declaraciones? ¿Sentís verdaderamente que no tenéis donde esconder vuestra vergüenza? ¿Creéis realmente que no estáis cualificados para ser Mi pueblo? Si sois completamente ajenos a las preguntas anteriores, esto muestra que estás pescando en aguas turbias, que sólo estás maquillando los números. En el momento pre-ordenado por Mí serás sin duda eliminado y echado al abismo sin fondo por segunda vez. Estas son Mis palabras de advertencia, y Mi juicio derribará a cualquiera que se las tome a la ligera, que, en el tiempo escogido, se verá afligido por el desastre. ¿No es así? ¿Sigue siendo necesario que provea ejemplos para ilustrar esto? ¿Debo hablar de forma más clara para proveerte un modelo como ejemplo? Desde el momento de la creación hasta hoy, muchas personas han desobedecido Mis palabras y, por tanto, han sido expulsadas y eliminadas por Mi corriente de recuperación; en última instancia, sus cuerpos perecen y sus espíritus son echados al Hades, e incluso hoy siguen sometidas a un castigo severo. Continuar leyendo «Las declaraciones de Dios al universo entero: La cuarta declaración»